Probablemente lo hayas oído en las noticias o incluso lo hayas vivido de primera mano. Son muchas las personas que hoy en día pueden decir que saben lo que realmente es haber sido víctima de una situación de brutalidad o excesivo uso de la fuerza por parte de autoridades policiales. Pero ¿qué es lo que realmente significa el término ‘’brutalidad policial’’? ¿Cómo identificamos si realmente hemos sido víctima de esta?
Si bien las autoridades están para ayudarnos y protegernos en caso de que la situación lo requiera, la fuerza que utilizan y las herramientas con las que el oficial de policía actúa contra el ciudadano deben de ser medidas. No puede actuar con más fuerza de la necesaria para detener un acto delictivo o violento, ya que esto podría causar daños físicos, hiriendo de gravedad a la víctima o incluso hasta podría ser letal.
Según las leyes de Estados Unidos, específicamente en la Cuarta Enmienda, toda persona dentro del país posee el derecho constitucional que lo protege de ser víctima de la fuerza excesiva y de la brutalidad policial, es decir, ninguna autoridad podrá hacer uso desmedido de su poder. En la Constitución de los Estados Unidos de América, también se incluye en la Octava Enmienda que el castigo cruel está terminantemente prohibido, por lo cual ningún oficial de policía deberá utilizar su fuerza para castigar de este modo a los ciudadanos.
¿Qué abarca el uso de fuerza excesiva?
- Ataques verbales: si un oficial de policía utiliza la lengua para atacar o disminuir a ciudadanos es una forma de brutalidad policial.
- Ataques físicos: si un oficial de policía utiliza la fuerza física, haciendo uso de sus puños o incluso patadas.
- Ataques con herramientas: si un oficial de policía hace uso de algunas herramientas de fuerza policial como lo son los perros policiales, aerosol químico o taser cuando no es requerido o la víctima no está actuando de forma que podría representar un peligro para él mismo o para otros, es otra de las formas de brutalidad policial.
Queremos recordarles que esta situación puede resultar de gravedad y nunca debe de ser tomada a la ligera, por lo que en Lipeles Law Group siempre estaremos dispuestos a ayudarlos y asesorarlos para saber cómo actuar en una situación de esta índole.